viernes, 31 de agosto de 2012

Las urracas cambian su plumaje

Muchas aves de nuestras ciudades y nuestros campos están mudando su plumaje en estos últimos días del verano previos a la llegada de la temporada otoñal. Una de las especies en la que esta muda es más llamativa es la popular urraca o "pega" Pica pica. Numerosos ejemplares se observan con el cuello prácticamente desnudo, y si buscamos con atención podremos encontrar buenos montones de plumas de urraca esparcidos por parques y jardines.


No hay pájaro más inconfundible que la urraca, con esa mezcla de negro y blanco en el plumaje, sin olvidar los bonitos matices tornasolados de azul en alas y cola. Precisamente la cola, de gran longitud, es el otro rasgo que la identifica sin lugar a dudas. Las jóvenes muestran siempre la cola más corta y el color blanco del plumaje es más apagado. Son las plumas del cuerpo y las cobertoras alares las partes del cuerpo que mudan entre agosto y septiembre, así como también alguna rectriz de la cola, aunque no siempre. No mudan entonces las primarias y secundarias de las alas que no llegan a adquirir en los bordes el intenso brillo de las urracas adultas hasta sufrir por lo menos dos mudas otoñales.


La pega es la especie más ligada al hombre que existe en el mundo de las aves en Asturias, siendo casi imposible encontrar un ejemplar a más de 500 metros de cualquier construcción humana. Desde el mes de julio se observan prácticamente por todas partes, ya que en esta época es cuando los jóvenes se independizan y abandonan el nido. Con una media de 3-4 pollos por pareja es muy notable este gran incremento en sus poblaciones. Además los jóvenes, como ocurre en otras muchas especies, son más atrevidas y huyen menos del hombre.



Tienen mala fama las pegas como depredadoras de nidos. Pero su alimentación, como pone de manifiesto un reciente trabajo de la página de vertebrados ibéricos, es muy omnívora, comiendo casi de todo. Tan sólo un 5% de los ataques a otras aves tienen éxito, con lo cual se demuestra que no son depredadores muy eficaces, y al ser un ave muy urbana, estos ataques sólo repercuten en otras aves urbanas como palomas o gorriones.




sábado, 25 de agosto de 2012

Rumbo sur

Tenía ganas de retomar el blog después de un largo parón estival. Y qué mejor que hacerlo con la especie fetiche, la que se ha asomado en más ocasiones, el chorlitejo grande Charadrius hiaticula. Esta mañana en la playa de Bañugues se encontraba un pequeño grupo de limícolas dominado por esta especie, con unas 12 aves. Una de ellas me llamó la atención y estuve observándola bastante rato.


Lo que más destaca en él es el borde de ataque de las alas, bastante oscuro y en un claro contraste con el resto de las partes superiores, con el típico tono ocráceo. El collar es bastante grueso y negro, al igual que la lista ocular, se trata sin duda de un macho que aún conserva casi intacto el plumaje nupcial.



Otra cosa que me llamó la atención es que durante un momento lo vi nadando, aunque fuera un pequeño tramo de una roca a otra. Nadando¡¡¡ Llevo años observando a estos bichos y nunca había comprobado sus dotes natatorias.


En el grupillo de 12 chorlitejos había tantos adultos como jóvenes, aquí tenemos a uno de estos últimos.


Se diferencian bastante bien. El color del pico no es un criterio fiable, ya que en algunos adultos aún aparece anaranjado pero en otros ya es oscuro como en los jóvenes. Hay que fijarse en la coloración de las zonas de  la cara (collar y lista ocular) que los adultos es negra y en los jóvenes parda. Además en los adultos el collar está completo y en los jóvenes aparece partido.




Otras especies eran más escasas, junto con los chorlitejos se encontraban un par de correlimos tridáctilos Calidris alba y un correlimos común Calidris alpina, jóvenes todos.


Hace más o menos un mes que los limícolas están volviendo a sus cuarteles de invierno rumbo al sur, al continente africano. La corriente migratoria es la más importante de todo el movimiento que se detecta en Bañugues, ya que estas aves proceden sobre todo del Atlántico Norte, Islandia y Groenlandia. Mis primeras observaciones datan del día 28 de julio, con buenos grupos de correlimos común, que en estas tempranas fechas son en su mayor parte adultos.



Alguno de ellos puede ser incluso identificable como perteneciente a la subs. arctica, reconocible por su mancha muy pequeña de color negro en el pecho y el pico bastante corto. En esa fecha ya anoté al menos un juvenil de correlimos común y varios de chorlitejo grande.