martes, 31 de mayo de 2016

Longicornios

Uno de los grupos más atractivos de insectos y también de los menos conocidos por la gente en general (aunque muy perseguidos por los coleccionistas) es el de los escarabajos longicornios, o cerambícidos. Como ya indica su nombre, muchos presentan largas antenas, incluso de mayor longitud que el cuerpo, y en bastantes ocasiones también coloraciones muy llamativas. En Gozón no encontramos demasiadas especies, y las que hay no suelen ser muy frecuentes, pero sí hay algunas que merece la pena destacar. Entre ellas las que tienen coloración amarilla y negra, como es el caso del escarabajo avispa Clytus arietis.


De color negro y líneas amarillas simétricas, este escarabajo es un buen imitador de las avispas, un fenómeno que se denomina mimetismo batesiano. Como en el caso de todos los cerambícidos, las larvas se alimentan de madera muerta, en la cual completan su desarollo durante una larga temporada, hasta de varios años, siendo por ello importantes recicladores de la naturaleza.


Por contra, los adultos viven muy poco tiempo, apenas semanas o escasos meses, y muchos son florícolas, siendo también importantes polinizadores. Un buen lugar para encontrarlos en Gozón es en las plantas umbelíferas que crecen en los bordes de los arroyos.


Los longicornios se encuentran sobre todo en el final de la primavera y principios de verano. Este año han empezado a salir un poco tarde, y estos días me estoy encontrando a los primeros, como el escarabajo avispa de las fotos anteriores que localicé en un arroyo de Bocines, o este otro de más abajo, Rutpela maculata, también de tonos amarillos y negros, en otro arroyo de Ambiedes.


Como se ve, es éste un verdadero longicornio, ya que las antenas, también amarillas y negras, son más largas que el cuerpo, llamativamente estrecho. Mide entre 15 y 20 mm y el patrón de bandas amarillas y negras es variable de unos individuos a otros.


En definitiva, aunque no son muy abundantes, o quizá precisamente por eso, los cerambícidos constituyen un buen objeto de búsqueda para los amantes de la fotografía de naturaleza. Cuando se encuentran suelen ser bastante tranquilos y nos ofrecen muy buenas oportunidades para llevarnos a casa un buen saco de imágenes.


martes, 24 de mayo de 2016

Los dueños del aire

Durante los meses de verano los milanos negros Milvus migrans se vuelven los dueños del aire a lo largo y ancho del territorio de Gozón. No hay que olvidar que hace unos 20 años esta rapaz era una rareza en el concejo, pero a partir de finales del siglo XX inició una fuerte expansión, y hoy en día su presencia es habitual, similar a la del omnipresente busardo ratonero. He podido observar como compiten incluso con éstos por los mejores territorios.


Los milanos negros permanecen poco tiempo entre nosotros, llegan en los meses de marzo y abril y es una de las primeras especies en retornar a África, muchos ya en agosto, periodo durante el cual suelen sacar adelante dos pollos. Especie muy oportunista, se ha especializado en sobrevolar los prados cuando éstos se van segando, como éste que pude observar hoy por la zona de San Juan de Nieva, a la caza de los invertebrados o pequeños mamíferos que las máquinas van dejando al descubierto.


domingo, 22 de mayo de 2016

Lavanderas boyeras establecidas

Tras la época de paso prenupcial, que tiene lugar sobre todo en la última parte de abril y primeros días de mayo, las lavanderas boyeras Motacilla flava se han establecido a lo largo de la campiña de Gozón. Las parejas ya se han formado, los nidos ya están construidos y las hembras ya se encuentran incubando, por lo que la mayor parte de las aves que se registran en estas fechas son machos. Uno de los mejores lugares para observarlos son las extensas praderías que se extienden al norte de la playa de Verdicio, donde esta mañana pude fotografiar unos cuantos.


La lavandera boyera es quizá el ave más variable de la avifauna europea, y existen diversas subespecies que se diferencian por su coloración. Hay que recordar que la nuestra es la subespecie iberiae, caracterizada por tener la cabeza y nuca de un gris más oscuro que la nominal, además de la garganta blanca y la ceja muy marcada. Se distribuye sobre todo por la Península Ibérica, aunque falta en amplias zonas, y tiene pequeños núcleos en el sur de Francia y Norte de África.


Las lavanderas boyeras son aves de espacios abiertos, por lo que tienen que lidiar con frecuancia con los elementos meteorológicos adversos, como por ejemplo el fuerte viento del oeste que sopló hoy todo el día. Así con todo, la mayor parte de ellas suelen sacar adelante su nidada, que allá por el mes de julio abandonará el nido, pasando aquí una pequeña temporada antes de volver a África.


martes, 17 de mayo de 2016

Garza imperial en Xagó

Las charcas de Xagó se han convertido en estos últimos años en lugar de parada de la escasa garza imperial Ardea purpurea. Hoy al atardecer mientras daba un paseo por allí se levantó un ejemplar que estuvo sobrevolando la zona unos instantes.


Tras sobrevolar el perímetro de las charcas se decidió a bajar y camuflarse entre los carrizales.


Situada justo en medio de la foto, hay que afinar muy bien la vista para lograr divisarla entre los carrizos.


No podemos olvidar que la garza imperial, aunque suele verse todas las temporadas, es un migrante primaveral muy escaso en Asturias, con ejemplares contados y siempre aislados entre marzo y mayo. Los ejemplares que se ven aquí son seguramente los que se reproducen en la parte occidental de Francia y los Países Bajos.


En ocasiones permanecen más de un día, alimentandose y reponiendo fuerzas, pero su paso suele ser fugaz, parando tan sólo a descansar antes de dar el siguiente salto.


jueves, 12 de mayo de 2016

Pocos pollos de mayo

Pequeños grupos de zarapitos trinadores o pollos de mayo Numenius phaeopus, como se les conoce por aquí, se han dejado ver estos días en migración por los campos gozoniegos. A pesar de su nombre popular los trinadores son más frecuentes en abril, cuando alcanzan sus máximos. Hace unos años la migración prenupcial de esta especie era realmente espectacular, con bandos que superaban fácilmente la 100 aves, en especial en la playa de Bañugues donde algunas jornadas se podían reunir más de 300.


Sin embargo desde hace varias temporadas la situación ha cambiado radicalmente, y esta primavera no ha sido una excepción. Los grupos que se observan son normalmente muy pequeños, y apenas pasan de las 50 aves los mejores días. La razón de esto, como siempre, es un misterio. Quizás ahora siguen otra ruta migratoria, quizás no se detienen a descansar en los campos cantábricos, quizás hay un descenso poblacional...quién sabe. Lo que es una pena es que ya apenas se escuchan sus interminables reclamos que antes llenaban el litoral como un sonido inconfudible de la primavera.




domingo, 8 de mayo de 2016

Joven de tórtola turca

En las cercanías del parque Zapardel de Luanco se ha instalado una pequeña colonia de tórtola turca Streptotelia decaocto, compuesta por unas pocas parejas. Estas tórtolas anidan en los árboles y arbustos del propio parque o de los jardines adyacentes, y están tan acostumbradas a la gente como las propias palomas, alimentándose en los prados a pocos metros de las personas sin inmutarse. Esta mañana he podido pasar un buen rato observándolas.


El caso de la tórtola turca es un ejemplo bien conocido de colonización reciente, y a partir de los años 30 del siglo XX comenzó a expandirse por Europa desde sus poblaciones de la península de Anatolia. En los años 60 llegaba a la Península Ibérica (su primera cita fue en Colunga) y quizá algunos años después a Gozón. Mi primera cita de la población luanquina data de los años 90. Ahora se distribuye por todo el pueblo, con el núcleo principal en torno al parque Zapardel.



El periodo reproductor de la tórtola turca, como el de otras columbiformes, es bastante dilatado, y en zonas apropiadas puede extenderse de febrero a octubre, sacando adelante hasta tres puestas anuales. Hoy en el grupillo de tórtola del parque pude distinguir un joven volantón ya de este año. Teniendo en cuenta que el periodo de incubación dura 14-18 días y que los pollos permanecen en el nido entre 15 y 20, es probable que la puesta de la cual nació este juvenil se produjera en la primera quincena de marzo.





martes, 3 de mayo de 2016

Turno de los azules

Tras la aparición de nuestro más temprano caballito del diablo, el rojo Pyrrhosoma nymphula, es el turno de varias de nuestras especies azules, que van asomando a medida que avanza el mes de abril. Este año parece que han ido algo retrasados y a pesar de visitar alguno de sus principales enclaves en el concejo no he podido detectarlos hasta el pasado puente de mayo, aprovechando los pocos días soleados de los que hemos disfrutado esta primavera.

Uno de ellos es el caballito de color azul cielo Enallagma cyathigerum, que en Gozón está prácticamente restringido al embalse de La Granda. A estas alturas del año debería haber un buen número de ellos pero sólo pude detectar unos pocos ejemplares, como este macho adulto.


Los machos inmaduros presentan un precioso tono violeta.


Eso sí, en ellos ya se puede reconocer el rasgo más distintivo, la pequeña mancha en forma de maza del segundo segmento abdominal.


Las hembras de esta especie por lo general también son azules, aunque diferentes, presentando mucho más negro en los segmentos abdominales. Sin embargo también son identificables.


El segundo caballito azul que aparece en Gozón es el Coenagrion mercuriale, de este género hay varias especies en Asturias pero ésta es la única que he localizado en el concejo hasta el momento. Pude ver algunos machos en una de sus mejores poblaciones en el lavadero de Cantalarrana.


Especie protegida a nivel europeo, en la zona central asturiana parece alcanzar un óptimo de distribución ya que es relativamente frecuente en regatos y pequeños arroyos, que constituyen su hábitat ideal. Se puede reconocer por la manchita en forma de casco del segundo segmento abdominal.


Y por fin la tercera especie en aparecer es una de las más pequeñas, Ischnura graellsii, también bien distribuida por el concejo. Este caballito es casi negro, con unas pequeñas manchas azules en los últimos segmentos abdominales. Los primeros los localicé también en La Granda.