sábado, 29 de septiembre de 2012

Por sorpresa, un búho chico

Esta mañana, unos cuantos componentes del grupo local de SEO-Asturies realizamos una excursión por tierras gozoniegas. A primera hora, en Punta la Vaca, donde el paso de marinas fue bastante pobre (la climatología, con viento de nordeste fuerte no ayudó mucho). Después, a Bañugues, donde pudimos observar unos cuantos limícolas y gaviotas. Y a mediodía, a Cabo Peñas, y allí por sorpresa, nos aterrizó un búho chico Asio otus, sin duda una de las más espectaculares observaciones de las que he podido disfrutar desde que empecé con este blog. Entre nosotros estaba Luis Mario Arce, que me ha cedido amablemente sus fotografías para ilustrar y dar brillo a esta entrada.


El búho llegó mientras nosotros estábamos allí, en alas de un chubasco venido desde el mar, justo adonde nos encontrábamos. Y se fue directo a camuflarse entre las ramas de uno de los escasos pinos que se encuentran en el brezal de Peñas, sin duda ya lo tenía enfocado como objetivo al divisar la costa. Un camuflaje perfecto, como podéis observar...


¿Qué mas puedo decir? Un ave preciosa, como todas las estrigiformes, o rapaces nocturnas. El búho chico tiene una amplia distribución, ocupando casi toda Europa. Las poblaciones europeas son sedentarias en su mayor parte, salvo las más norteñas, sobre todo las escandinavas, que son parcialmente migradoras, desplazándose hacia el sur. Sin duda este ejemplar debe proceder de estas zonas de más al norte. Aquí tenéis un par de fotos más de esta hermosa ave en vuelo.


En Asturias se reproducen unas cuantas parejas de búho chico, sobre todo en bosques caducifolios de la Cordillera Cantábrica. Sin embargo es una especie muy desconocida, porque de todas las rapaces nocturnas es la más silenciosa. En otoño debe llegar una pequeña porción de aves a invernar, como demuestra la observación de hoy. A mí me parece un ave juvenil, por el fuerte barreado de las partes inferiores y la coloración general del plumaje.


Estas fotos son el testimonio de ese cúmulo de casualidades felices que se dan a veces en esta apasionante afición que es la ornitología. La casualidad de estar en Cabo Peñas, la casualidad de que el ave llegase justo cuando estábamos allí y justo donde estábamos, la casualidad de que allí crezca uno de los escasos pinos que hay en Peñas, la casualidad de que el ave se quedara allí tranquila sin espantarse, la casualidad de tener el equipo adecuado...

Qué mejor cita para celebrar la entrada número 200 de este blog. Con ella quiero daros las gracias a todos los que me seguís, espero que sigamos compartiendo muchas más vivencias y descubriendo más cosas acerca de nuestros alados vecinos. Que sirvan para ir conociendo el patrimonio natural del concejo, porque sólo se llega a respetar de verdad aquello que se conoce.

viernes, 28 de septiembre de 2012

Paseo por La Granda con pajarinos

Ayer por la tarde aprovechando que asomó el sol me acerqué hasta el embalse de la Granda a ver qué tal andaba la cosa. De acuáticas mal, el pantano sigue bajo mínimos como es su tónica habitual hace tiempo, pero en las zonas más arboladas pude localizar algún pajarín de los que andan en migración. Por ejemplo, muy aquerenciado a una salguera negra me entretuve mirando como cazaba un papamoscas gris Muscicapa striata, especie nueva para mí en el blog.


Es éste un precioso insectívoro, con las partes inferiores muy blancas mitigadas por un barreado gris en el pecho. Como otros muchos migrantes transaharianos sus poblaciones están sufriendo un alarmante declive en muchas zonas. Esta es la mejor época del año para observarla en nuestro concejo.

Muy cerca de él, de nuevo un joven de colirrojo real Phoenicurus phoenicurus. En la misma salguera, ya que estos pajarillos utilizan los arbustos como atalaya para observar los prados de alrededor en busca de presas, y a la vez como refugio.



También se movía por la zona alguna curruca zarcera, pero estas son muy escondedizas y es muy difícil localizarlas fuera de la ramasca.

Como dije, de acuáticas el embalse sigue bajo mínimos, y desconozco completamente la razón. Entre las que pude observar, algún joven de ánade real o azulón Anas platyrinchos, nadando y comiendo hierba en las orillas del embalse.



Un pequeño grupo de 4 fochas Fulica atra.


Y allá lejísimos, en el otro extremo del embalse, una garza real y un par de garcetas.


jueves, 27 de septiembre de 2012

Gaviota sombría noruega y nuevos limícolas


El pasado día 19 pude localizar en el bando de gaviotas de la playa de Bañugues un ejemplar anillado de gaviota sombría Larus fuscus, del que tras una ardua "persecución fotográfica" pude obtener algunas imágenes. Se trata de un típico ejemplar de segundo invierno, o 2-cy (segundo año calendario), la anilla es negra código JJ5X, y su origen es noruego, por tanto de la subs. intermedius





Ya me ha enviado su historial Nils Lorentzen, responsable de los programas de anillamiento de este país. La gaviota procede de la colonia de Rauna, Farsund, Vest-Agder, que dista 1822 km de la playa de Bañugues. Hasta ahora, su historial es corto:  Esta es una de las probables rutas que podría haber seguido hasta aquí, de las mil posibles, por cortesía de Google Maps.


Por Asturias pasan e invernan gaviotas sombrías de toda la fachada atlántica, desde Francia hasta el sur de Noruega. De acuerdo con el estudio hecho por César Álvarez Laó en Asturias las gaviotas noruegas son una minoría respecto a las británicas u holandesas, mientras que Salvador García encuentra que en Málaga representan un buen porcentaje de las gaviotas invernantes. Probablemente se cumple una vez más el patrón de que las aves de los extremos de las zonas de nidificación emigran a mayor distancia.

Por otro lado, el día que localicé los charranes en Bañugues también pude ver varias especies nuevas de limícolas, como dije el día de temporal era tranquilo e invitaba a que las aves entraran a descansar. Entre ellos, por ejemplo, una bonita pareja de agujas colipintas Limosa lapponica; el macho, en plumaje nupcial, es difícil de ver en esta época.


Mi primer ejemplar esta temporada de chorlito gris Pluvialis squatarola, probablemente un inmaduro por sus manchas oscuras en el pecho.


Y en el bando de limícolas pequeños, también mi primer ejemplar para la temporada de correlimos zarapitín Calidris ferruginea, un juvenil.


Los otros pequeños eran un total de 6 correlimos comunes Calidris alpina, un grupillo que permanece más o menos estacionado desde hace varios días, y 16 chorlitejos grandes Charadrius hiaticula, cuyo número parece haber ido en aumento poco a poco.


Por contra, no localicé ningún correlimos tridáctilo Calidris alba. El bando de esta especie llegó a contar con 17 aves, pero poco a poco fueron abandonando la playa, el último mohicano lo pude ver el mismo día de la garceta juvenil que comenté el otro día.


martes, 25 de septiembre de 2012

Charranes y gaviotas

Me gustan los días de temporal en la playa de Bañugues, me gustan porque está la playa prácticamente vacía  de gente y las aves tienen  tranquilidad para reposar. Especies que de otra forma sería casi imposible observar se localizan durante estas jornadas lluviosas ya que no se ven molestadas. Así me ocurrió hoy que me acerqué un ratín a media tarde y estuve un rato observando a dos charranes patinegros Sterna sanvicensis que se posaron en la arena junto a las gaviotas.


Se trataba de un ejemplar adulto y otro juvenil. Aunque el adulto ya presenta plumaje de invierno y no tiene caperuza en la cabeza, se reconoce bien porque el pico es negro con la punta amarilla, mientras que el del joven es negruzco en su totalidad. Además, el plumaje del adulto es gris uniforme, mientras que en el joven se aprecian bien las marcas alares negras de las coberteras.


Una característica muy notable del charrán patinegro, o garrucho como se le conoce por aquí, es lo ruidoso que es cuando viaja en migración, los bandos se oyen antes de verlos. Eso es porque se llaman de continuo, dado que las aves jóvenes dependen hasta el invierno de los adultos, que los alimentan. Esto pude comprobarlo hoy, porque el charrán joven se acercaba a su pariente con movimientos del pico y de la cabeza, seguramente solicitando comida.





Además de los charranes tuve alguna que otra interesante observación de gaviotas. Por ejemplo, este adulto de gaviota argéntea Larus argentatus, de la que sigue habiendo un pequeño goteo migrador.


Y entre los jóvenes de gaviota se ven algunos muy oscuros estos días, son gaviotas sombrías Larus fuscus que aún conservan el plumaje juvenil intacto, sin haber mudado al de primer invierno que es un poco más claro.


domingo, 23 de septiembre de 2012

Las artes pescadoras de una garceta

Ayer por la mañana me acerqué hasta la playa de Bañugues donde había un precioso ejemplar de garceta común Egretta garzetta, que lleva ya unos días en la playa.


Esta garceta me deleitó con sus preciosas y precisas artes de pesca, que diría José María García, en la desembocadura del arroyo La Cabaña. Os voy a mostrar como son estas técnicas...

Primero, la garceta prospecta tranquilamente el río caminando despacio o manteniéndose quieta y a la espera...



Cuando detecta su presa, la garceta se pone tensa, como un perro de presa estira su cuello...


Si la presa está cerca, la pesca directamente, pero si se encuentra un poco alejada empieza la carrera, a por él¡¡¡


Y una vez localizada, llegó el momento de arponear y pescar al pequeño pez y comérselo...



Pude comprobar, después de observarla bastante tiempo, que esta garceta al menos era una pescadora excelente. En cada intento prácticamente sacaba un pez del río. Incluso a veces, que después de pescarlo se le escapaba, volvía a recuperarlo para comérselo, dado que tras el arponeo con el fuerte pico el pez prácticamente esta muerto ya. Aquí os pongo una secuencia para comprobarlo...





Quizá por ello la garceta prefería pescar en el tramo menos profundo del arroyo, de apenas unos cm de profundidad. En él, a pesar de haber menos peces que en el tramo más profundo, son más fáciles de capturar y de recuperar en caso de que se suelten. Aquí se puede ver su zona de pesca.



No sé si os habréis fijado, pero este ejemplar además de los pies tiene las patas claramente amarillas. Me comenta César Laó (al que agradezco el dato) después de observar unos cuantos ejemplares en Zeluán que los juveniles de garceta común tienen las patas amarillas (un rasgo que las guías ponen como típico de la garceta dimorfa) y que cuando llegan aquí la mayoría ya lo han perdido, pero algunos aún lo conservan, que sería el caso de este ejemplar. Estaré atento a ver si se queda en la playa y comprobar como evoluciona.

viernes, 21 de septiembre de 2012

Mariposas de tercera generación: ícaro dos puntos

Septiembre es un buen mes para iniciarse en el mundo de las mariposas. No hay demasiadas especies, con lo que podemos ir empezando a identificar, el sol no calienta tanto como en pleno verano, con lo cual están menos activas posándose más a menudo , y además se ven menos flores, por lo que se concentran en menos lugares para libar y alimentarse.

Entre los licénidos, grupo de mariposas de pequeño tamaño de tonos azules y marrones, la más frecuente en Gozón es la ícaro dos puntos Polyommatus icarus en la que voy a centrarme hoy. En esta mariposa acaba de emerger la que es la tercera generación del año (la primera salió allá por abril), y este año estoy observando bastantes ejemplares, como por ejemplo hace unos días en los prados entre Moniello y Bañugues, a los que pertenecen estas fotos.

Para identificar con fiabilidad hay que fijarse tanto en el anverso como en el reverso de las alas, sobre todo en la parte de abajo. La hembra en esta zona es más oscura que el macho.




El ejemplar de arriba es un macho y los otros dos hembras. Como se ve, además de tener un tono más oscuro, los puntos oscuros son más grandes y están mejor definidos en las hembras.

En su parte superior existe un claro dimorfismo sexual. Los machos son de un marcado azul pálido, que va variando según los individuos. Puede ser que vayan perdiendo algo de color según van avanzando los días, aunque no estoy seguro.



Por su parte, las hembras presentan un color marrón oscuro, con lúnulas anaranjadas en los márgenes del ala. En estas hembras de tercera generación he visto varias diferencias con las de meses anteriores. Por un lado, son muy pequeñas, mucho más que los machos. Además, son totalmente marrones, y además notablemente oscuras, mientras que las que se ven en otras fechas pueden presentar una pequeña difusión azul en la parte superior.



Todas estas variaciones responden a la gran plasticidad de la especie, que es capaz de adaptarse a gran variedad de condiciones y por ello es el más común de los licénidos (no en vano en inglés se la conoce como "common blue"). A pesar de ello, como muchas otras especies de mariposas, la ícaro dos puntos está sufriendo un fuerte declive en muchos lugares, como por ejemplo Gran Bretaña. Un estudio reciente cifraba este declive en Gales en un 75%, unido al de su principal planta hospedadora, la leguminosa Lotus corniculatus.

lunes, 17 de septiembre de 2012

Migradores transaharianos en Peñas

El mes de septiembre es la mejor época del año para el avistamiento en Gozón de los migrantes transaharianos. Son aquellas aves que se reproducen en Europa o Asia, generalmente, y que pasan el invierno al sur del Sahara, atravesando por tanto este desierto en sus migraciones. En realidad hay un buen número de pequeños pajarillos que prácticamente sólo podemos observar este mes en nuestro concejo, dado que no crían aquí y en migración primaveral prácticamente no aparecen.

Ayer domingo en un paseo por la rasa de Cabo Peñas con mi amigo Juan Granda pudimos observar unos cuantos. El más llamativo es la collalba gris Oenanthe oenanthe, dado que se posa en áreas despejadas de vegetación. De esta observamos un total de 3 jóvenes.



Para poder observar otras especies lo mejor es arrimarse a las zonas donde crecen pequeños arbolillos o arbustos, ya sean sauces, pinos u otros cualesquiera. La razón es que los pajarillos se esconden en su ramaje, y en ellos tienen una atalaya para vigilar los prados de alrededor donde encuentran sus presas, o bien se alimentan directamente entre su follaje. En estas zonas de pequeños arbustos la especie más frecuente en migración, y la que más vimos ayer, unos 10-12 ejemplares, es el mosquitero musical Phylloscopus trochilus.


Otro pajarín del que vimos algún ejemplar, en concreto cuatro, fue el papamoscas cerrojillo Ficedula hypoleuca.



Y allí muy lejos, en el quinto pino, y nunca mejor dicho, un ejemplar de colirrojo real Phoenicurus phoenicurus, lo pongo porque a diferencia de los anteriores es bastante escaso en migración otoñal, apareciendo ejemplares muy contados. Esto es así porque entre los años 1970 y 2000 hubo un fuerte declive de la especie a nivel europeo, aunque ahora parece estar recuperándose ligeramente.



Hay otra especie que este año está presentando buenos números pero que ayer no llegamos a ver, como la tarabilla norteña. Y otras que pueden aparecer de forma escasa, como las currucas zarcera o mosquitera, el ruiseñor, el escasísimo carricerín cejudo, del que el año pasado pude ver un ejemplar por esta zona...En cualquier caso una excelente oportunidad para acercarnos a la rasa de Peñas y aumentar nuestro catálogo de observaciones.