miércoles, 26 de diciembre de 2012

Un alca jovencilla

Son fechas éstas propicias para la observación de álcidos en diversos lugares de la costa gozoniega, aunque sin duda el mejor punto para hacerlo es la bahía de Luanco. Hoy por la tarde se daban unas condiciones ciertamente inmejorables para detectar estas aves marinas, con pleamar, mar en calma y buena luz, así que me acerqué un ratín por la tarde, y tuve suerte. Un ejemplar jovencillo de alca común Alca torda nadaba en las aguas del puerto nuevo.


Se aprecia bien que es un ave de primer invierno por su pico tan pequeño comparado con el del adulto, más agudo y sin marca blanca. La propia forma del pico diferencia bien al alca del arao común, dado que en este es bastante más largo y afilado.


La verdad es que el alca joven es un pájaro muy bonito, parece casi de juguete. Aquí la tenemos durante un momento que aleteó, mostrando el característico dibujo de la parte inferior de las alas.


Al principio dije que tuve suerte, y es que tan sólo 5 minutos después de llegar, el joven de alca se puso a pescar, y ya sabemos cómo se las gastan los álcidos, tras un par de zambullidas la perdí de vista...


4 comentarios:

  1. Y aparecen varios metros más alla, donde menos lo esperas. Son confiadas, hasta en el puerto deportivo, en medio de Gijón, se atreven y posan tranquilas.

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    1. Sí, parece que no tienen miedo a nada, en especial las jóvenes, luego son más desconfiadas...

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  2. Parece un patito de aquellos sin patas que se colocaban en los ríos de plata de los nacimientos...

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    1. Con ese diseño blanco y negro y esa cabecina parecen de juguete jeje...son una pasada.

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