domingo, 29 de abril de 2012

Garceta con pies rojizos

Menuda sorpresa esta mañana en Bañugues, una garceta con los pies de un marcado tono rojizo. ¿Qué podía ser eso?


En seguida me puse a buscar alguna referencia en guías y en internet, y en español tan sólo encontraba alguna foto aislada y un comentario en el blog de la ría de Avilés sobre garcetas con patas rojas. En el resto de sitios una machacante insistencia con los pies amarillos de las garcetas, salvo las americanas, que en varios lugares anotaban como se volvían anaranjados en época de celo. Al fin César Laó me lo confirma, los pies de la garceta común Egretta garzetta adquieren un tono rojizo o anaranjado en época de celo.


También encontré alguna referencia en inglés, por ejemplo en esta estupenda ficha de la página web de conservación de ardeidas de la IUCN. La verdad es que yo nunca lo había visto, no tenía ni idea, y me sorprende no encontrar más referencias a este hecho. Otro rasgo típico de este plumaje es que las bridas (lo que llaman en inglés lore), la parte desnuda que va del pico al ojo, adquiere también un tono de color, en este ejemplar se veía ligeramente violáceo.




En cuanto a la migración de limícolas continúa apreciándose buen paso de zarapito trinador Numenius phaeopus, que se pueden ver tanto posados en las rocas como en la arena de la playa.












Hoy cuando llegué al mediodía sólo conté unos 20, pero luego arribó un grupo más grande, de forma que se juntaron unos 110, y aprovechando que la playa estaba vacía a la hora de comer se movieron a la playa a refrescarse en el río.


De otras especies continúan números muy escasos, destacando dos ejemplares de archibebe común Tringa totanus, especie que me da la impresión que se ha vuelto muy escasa en el paso.


Del resto de pequeños me topé con un vuelvepiedras y 3 o 4 andarríos chicos comiendo entre las rocas.



Y disimulada en el bando de zarapitos una aguja colipinta Limosa lapponica, en este caso una hembra, no un macho como el otro día. Este hecho es importante, porque indica una renovación en los bandos de zarapito que sedimentan en la zona. Ahí está, reposando, se ve más clarita y un poco más pequeña.


Y de otras aves una preciosa pareja de azulón o ánade real Anas platyrhynchos, con el macho ya en plumaje de eclipse. También había bastantes gaviotas, pero de eso hablaremos otro día.


2 comentarios:

  1. Estoy mirando en mis guías, y lo de las bridas sí sale en la Svensson & Mullarney, pero lo de las patas, en ninguna (yo tampoco me doy cuenta).

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    1. Y además pone que es por muy breve tiempo, me imagino que con el tema de los pies pasará lo mismo. Un saludo

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