jueves, 21 de junio de 2018

El inicio del paso postnupcial

La naturaleza lleva su propio ritmo, ajeno por completo al de los seres humanos. Por eso nos cuesta identificar a veces la evolución de los acontecimientos que suceden en ella. Hace pocos días, algunas aves estaban aún viajando con destino a sus territorios de cría, en plena migración "prenupcial", y ya se pueden ver por estas fechas las primeras aves de retorno a sus zonas de invernada, es decir, la "migración postnupcial". Ayer día 20 de junio lo pude comprobar en la ensenada de Llodero.


El ejemplo más claro de ello es el de la gaviota reidora Chroicocephalus ridibundus. Ya desde finales de mayo se dejaba ver por la ensenada algún ejemplar aislado, normalmente inmaduro, pero ayer ya ocupaba el lugar un buen grupo de aves con varios adultos aún en plumaje nupcial.


Pero el hecho definitivo para constatar que ya es un grupo en migración postnupcial es la aparición de aves juveniles nacidas este año. Junto a ellas, la observación de ejemplares adultos de gaviota cabecinegra hace confirmar esta idea.


¿De dónde vienen estas gaviotas? El registro de un ave anillada, con código AK54, nos puede dar una idea. Esta gaviota se anilló en 2017 en la colonia belga de Loupoigne, siendo observada el año pasado en varias localidades francesas. Parecen proceder por tanto, como es lógico, de las colonias más cercanas del oeste de Europa, teniendo en cuenta que pueden llegar aquí en apenas uno o dos días de vuelo.


Además de las gaviotas, otras especies de acuáticas parecen estar ya en este viaje de retorno, tal es el caso de alguna garza real Ardea cinerea adulta, o de su pariente la blanca garceta Egretta garzetta, que ya se dejan ver por la zona.


Mas enigmático para mí es el caso de los grupos de limícolas que por estas fechas se están viendo ya por la ensenada, en especial de chorlitejo grande y correlimos común. Estas son fechas muy tempranas para la migración postnupcial de estas especies, en comparación con otros años. Es posible que se trate de reproductores fracasados, o de aves a las que no ha dado tiempo a llegar a las zonas de cría, tras esta primavera tan complicada que hemos tenido. O, simplemente, migrantes muy adelantados por cualquier otra circunstancia. La naturaleza a veces es imprevisible.


No hay comentarios:

Publicar un comentario