domingo, 31 de octubre de 2021

Chorlitos dorados en migración

A partir del mes de octubre comienzan a llegar pequeños bandos de chorlito dorado Pluvialis apricaria en migración a los campos asturianos, especialmente en el litoral. Uno de estos grupos de unas 20 aves lleva varios días en los prados de Moniello, alimentándose por la zona. Su mejor alternativa para la supervivencia es la tranquilidad, por eso se mantienen agazapados confiados en camuflarse con el entorno, así que conviene mirarlos desde una distancia prudencial, sin molestarlos en exceso.


El chorlito dorado tiene al menos dos subespecies. Una de ellas, la nominal, nidifica sobre todo en Inglaterra, con algunas parejas en el oeste de Europa, y es casi sedentaria, desplazándose apenas unas decenas o cientos de km para invernar. La segunda subespecie, la P.a. altifrons, se encuentra desde Groenlandia a Siberia, y es migradora, con desplazamientos de mayor magnitud.


Los chorlitos dorados que aparecen ahora en esta primera oleada migratoria proceden seguramente de las poblaciones islandesas, aunque éstas invernan en su mayor parte en Irlanda, que les queda más cerca. Sin embargo se sabe por estudios con aves anilladas que buena parte de las aves invernantes en Portugal tienen este origen islandés. Ya más avanzado el otoño, incluso en pleno invierno, como se sabe por los estudios de radiomarcaje, llegan las aves de origen escandinavo y ruso, las cuales se desplazan en esta primera parte de la estación hasta el oeste de Europa. La llegada de estos contingentes es muy variable y depende mucho de la climatología. Las aves siberianas migran al este del Mediterráneo.



Para saber más:

Domingos Leitão & Salvador Peris (2004): Origin of Lapwings Vanellus vanellus and Golden Plovers Pluvialis apricaria wintering in Portugal. Ornis Fennica 81 :49-64

Paula Machín, Juan Fernández-ElipeManuel FloresJames W. FoxJose I. AguirreRaymond H. G. Klaassen (2015):  Individual migration patterns of Eurasian golden plovers Pluvialis apricaria breeding in Swedish Lapland; examples of cold spell-induced winter movements. Journal of Avian Biology,  46, 634-642



2 comentarios: