miércoles, 26 de agosto de 2020

La migración más extraña

Como la mayor parte de nuestras especies de avifauna, el alcaudón dorsirrojo Lanius collurio finaliza la estación reproductora en la segunda quincena de julio, con la independencia de los jóvenes del año. Y como muchas otras aves por esta época se detectan aves por la campiña durante su migración a África.



Lo que diferencia a esta especie del resto es lo extraño de su ruta migratoria. Los demás migrantes transaharianos que vemos por estas fechas siguen un rumbo suroeste, pero el alcaudón dorsirrojo vuela en dirección contraria, hacia el SE de Europa, donde cruzan primero el Mediterráneo y luego el desierto del Sahara. Alcanzan de esta manera la franja del Sahel donde pasarán un buen tiempo estacionados, entre 1 y 2 meses.



Pero no es ésta su zona de invernada definitiva, que ésta más al sur de África. La vuelta en primavera se realiza incluso por una ruta más oriental, bordeando el Mediterráneo en muchas aves.

Es muy probable que esta ruta tan extraña tenga razones evolutivas, y que el alcaudón dorsirrojo colonizara el oeste de Europa a partir de poblaciones orientales. El resultado es que las parejas asturianas se encuentran cerca de su límite de área de distribución y apenas se registren aves en migración postnupcial, sólo algunas jóvenes inexpertas como estas dos que localicé esta semana en la campiña.




lunes, 24 de agosto de 2020

Se van reuniendo en grupos

Una vez que termina la estación reproductora y los juveniles del año ya son independientes, muchas aves se van reuniendo en grupos. De esta forma pasarán los siguientes meses, hasta la entrada de la próxima primavera. El vivir en grupo les ayuda a aumentar su supervivencia, especialmente de las aves más jóvenes e inexpertas.

La naturaleza de estas concentraciones es muy diversa, y depende de diversas características de cada especie, sobre todo el tipo de alimentación. Podemos comprobarlo con dos casos extremos. Uno de ellos es el de los jilgueros Carduelis carduelis, que en esta época se van reuniendo ya en torno a diversas plantas productoras de semillas, en especial los cardos.


Los grupos de jilgueros en esta época ya son bastante numerosos, pudiendo alcanzar varias decenas de aves. Esta especie tiene una gran plasticidad, y puede aprovechar en cada momento los recursos que la naturaleza va poniendo a su alcance, aunque para ello tienen que ejercer un fuerte nomadismo, desplazándose allí donde están disponibles dichos recursos, siempre semillas. Son granívoros estrictos.


Los grupos de jilgueros incluyen a los juveniles del año, que ya son aceptados por los adultos al terminar la reproducción. Así van aprendiendo cómo y donde alimentarse. A medida que el tiempo transcurre los grupos se van juntando y aumentando su número. En invierno muchos superan el centenar.


El segundo caso es el del cistícola buitrón Cisticola juncidis. Ests pequeños pájaros se van concentrando en zonas de hierba alta, próximos a las zonas de campiña donde ha tenido lugar toda la nidificación.


En esta época, en la que los juveniles gozan de plena salud, las concentraciones de buitrón pueden alcanzar unas 30 aves, como la que localicé hace escasos días en los prados de Moniello. Pero los buitrones son aves frágiles, muchos jóvenes no superan sus primeros meses de vida y en invierno los grupos no suelen ser mayores de 10 ejemplares.


Además, al ser fundamentalmente insectívoros, las concentraciones de buitrón son muy sedentarias, y si encuentran una buena zona de vegetales de buen porte no se moverán de allí. Muchos ejemplares pasan toda su existencia en un área de unos pocos km2.



jueves, 20 de agosto de 2020

Unos sírfidos de verano

El mes de agosto es tal vez la mejor época del año para la observación de sírfidos, esa familia de moscas de gran colorido, devoradoras de pulgones en sus etapas larvarias y grandes polinizadores en estado adulto. Grupo de insectos que para mí están entre los más atractivos.

En este mes encontramos varias especies de vuelo exclusivamente estival, destacando especialmente la gran Milesia crabroniformis, el sírfido de mayor tamaño. Empieza a volar a finales de julio y por aquí por fortuna es bastante común. Como en la mayor parte de especies los machos tienen los ojos juntos y las hembras separados. Sienten gran atracción por las flores de hinojo.



Otra especie que aquí se encuentra en verano también es Eristalinus taeniops, aunque ésta es mucho más escasa. Destaca por sus preciosos ojos atigrados, tanto machos como hembras.



También típico del verano es Chrysogaster solstitialis, de reducido tamaño pero a su vez bastante característico, en especial los machos, que parecen pequeñas flechitas de un color negro azabache rematadas por dos grandes bolas de color rojo.


Y también característicos de esta época son los sírfidos del género Chrysotoxum, que tienen varias especies casi idénticas. Una característica de estos sírfidos es que son bastante erráticos y aparecen en lugares insospechados.


Contamos además con algunas especies que poseen dos generaciones, una en primavera y otra en verano, apareciendo ahora esta segunda. Una de ellas es la preciosa Volucella zonaria


o la no menos bonita Myathropa florea, una de las que más se parece a una abeja, con su torax amarillento.


Dos generaciones tiene también una de las especies más características por su dorso rayado, como es Helophilus pendulus


y también las especies del género Syrphus, en el que los machos se asemejan mucho. Este género da nombre a la familia.


Finalmente encontramos en verano especies que están presentes prácticamente todo el año, como el inevitable Episyrphus balteatus, quizá el más característico e inconfundible de todos.



Otro de los sírfidos con dibujo en los ojos es Eristalinus aeneus


la pequeña Sphaerophoria scripta


y el también pequeño Eupeodes corollae, especie que además es fuertemente migradora.


En su mayor parte los sírfidos se encuentran siempre cerca de los cursos de agua, sientiendo gran atracción sobre todo por dos tipos de flores: las umbelíferas y las mentas. Aunque su estudio detallado es difícil he podido notar un gran declive de estos insectos en los últimos años.

Todas las fotos fueron tomadas en este mes de agosto, la mayor parte en el concejo de Gozón.

sábado, 15 de agosto de 2020

Los primeros papamoscas cerrojillos

Los pinares de Cabo Peñas son un buen lugar para el registro de la migración postnupcial de papamoscas cerrojillo Ficedula hypoleuca. Buena parte de los días de esta estación se observan aves juveniles en solitario o pequeños grupos alimentándose entre los pinos. Hoy pude contabilizar unos 6 ejemplares de la especie.


Se sabe desde hace tiempo que los papamoscas cerrojillos del oeste de Europa migran a través de la Península Ibérica, y que la zona cantábrica es una zona importante de alimentación y forrajeo para los juveniles de la especie. Pero los últimos estudios migratorios arrojan algunos datos más.

Por ejemplo, se ha averiguado que la partida de las poblaciones es secuencial, y que estos primeros cerrojillos proceden de las poblaciones más al sur, por ejemplo de los Países Bajos o de las islas británicas, que inician la migración a principios de agosto. Las poblaciones del norte parten a mediados de mes.


Además, existe una fuerte conectividad en las rutas migratorias de la especie. Así, dentro de la estrecha franja de invernada de la especie, en el África subsahariana, las poblaciones de Europa occidental ocupan la zona más al oeste.

Pero además los estudios realizados con geolocalizadores concluyen que se encuentra una distribución escalonada de acuerdo a la latitud. Así, las poblaciones más norteñas (Escandinavia, Finlandia) se asientan en los lugares más occidentales, próximos a la costa, mientras que las de más al sur se refugian en zonas más al este.




Para saber más:

Ouwehand, J., Ahola, M. P., Ausems, A. N. M. A., Bridge, E. S., Burgess, M., Hahn, S., Hewson, C. M., Klaassen, R. H. G., Laaksonen, T., Lampe, H. M., Velmala, W. & Both, C. (2016). Light-level geolocators reveal migratory connectivity in European populations of pied flycatchers Ficedula hypoleucaJournal of Avian Biology47(1), 69-83





jueves, 13 de agosto de 2020

Paradas por temporal

Durante la época de migración postnupcial las borrascas atlánticas empujan hacia tierra firme a las aves que se encuentran viajando, ya que se oponen a sus desplazamientos. Los primeros temporales pueden tener lugar en el mes de agosto, y así ha sucedido esta temporada. Una situación con vientos fuertes del oeste e intensas lluvias provocó esta semana la primera sedimentación importante en la ensenada de Bañugues.

En el grupo de limícolas presente en la playa destacaba la presencia de un ejemplar adulto, aún en plumaje nupcial, de correlimos zarapitín Calidris ferruginea. Esta especie es muy rara en esta época ya que tiene una migración más oriental, por el mediterráneo.


El correlimos zarapitín se encontraba en un bando con otros limícolas de aparición más normal, como los correlimos común Calidris alpina o tridáctilo Calidris alba, así como el chorlitejo grande Charadrius hiaticula. Ya se observan los primeros juveniles del año de estas especies.




Además de los limícolas se pudo registrar un grupo de 6 charranes comunes Sterna hirundo, tanto adultos como juveniles. Este charrán siempre fue bastante regular en migración postnupcial, pero en los últimos años se ha vuelto muy escasa.




Otro charrán que se puede observar en esta época es el charrancito Sternula albifrons, siempre en número escaso. Un ejemplar se encontraba en la playa.


Estos temporales son buenos para la observación de aves en las playas, porque aleja al público que las frecuenta, y aprovechan la tranquilidad para descansar y alimentarse. El precio a pagar se encuentra en la dificultad para hacer fotografías debido a la escasez de luz natural

martes, 11 de agosto de 2020

Mariposas y flores de verano

En el verano asturiano florecen una serie de plantas que ejercen un gran poder de atracción sobre las mariposas, por producir un néctar abundante. Por ello si queremos estudiar la fauna de lepidópteros debemos acercarnos a los terrenos donde estas plantas se desarrollan.

Así, una de estas plantas es la arroyuela o salicaria Lytrum salicaria, planta de buen porte y flores púrpuras. Una mariposa que la frecuenta es la cleopatra Gonepteryx cleopatra, que en verano se muestra mucho menos activa debido a las temperaturas elevadas.


También es frecuente en la salicaria la gris estriada Leptothes pirithous, mariposa migratoria que este año se observa en grandes cantidades.



Otra de las especies clave en verano es el eupatorio Eupatorium cannabinum, de la familia de las compuestas y con una frondosa floración. Una mariposa que se siente muy atraída por esta planta es la pavo real Aglais io.


Y entre los piéridos la que es una de las especies más frecuentes y abundantes de Asturias, la blanca verdinervada Pieris napi.


Quizás las plantas estrella en época estival son las mentas, que ademas de mariposas atraen un buen número de insectos. Así, observamos entre otras a las vanesas Vanessa atalanta, que en esta época están brillantes y recién emergidas.



o a la mayor de las mariposas blancas, la blanca de la col Pieris brassicae.


Y una flor que encontramos prácticamente todo el año y que es un atractor infalible es la centaura Centaurea nigra. Encontramos en ella otra mariposa del grupo de las "ortigueras", la c-blanca Polygonia c-album, llamada así por la marca del envés de sus alas.


También a la pequeña dorada orla ancha Ochlodes sylvanus


o a una mariposa tan dependiente de esta planta que hasta le da nombre, la doncella de la centaura Mellitaea phoebe.


Casi todas estas plantas necesitan un cierto grado de humedad, por lo que las mejores zonas para su desarrollo son los prados cercanos a los arroyos y regatos, como este de la imagen donde están realizadas las fotografías que ilustran esta entrada, en la zona de Bocines.