Un día corriente de mediados de octubre la campiña costera de Gozón está invadida en toda su extensión por grandes contingentes de bisbita pratense.
Este pequeño pajarillo que ya llena el aire con su reclamo será el más abundante en el concejo durante unos cuantos meses.
Un día corriente de mediados de octubre los petirrojos ya se hacen notar en muchos lugares donde antes no estaban, van llegando los invernantes...
las tarabillas han completado su muda, han perdido la timidez y se adueñan de sus posaderos habituales...
los machos de colirrojo tizón se vuelven territoriales y muestran su agresividad en los acantilados...
y los machos de lavandera blanca se ven acosados por sus pequeños, que aún no quieren abandonar la tutela paterna.
Un día corriente de mediados de octubre aún se pueden ver los últimos migradores de mosquitero musical, devorando invertebrados a toda velocidad en el pinar de Moniello, ya van muy apurados...
no debemos confundirlos con los mosquiteros comunes, más oscuros, éstos quizás se queden aquí a pasar el invierno si están a gusto.
Un día corriente de mediados de octubre el esquivo macho de curruca cabecinegra nos puede dar una sorpresa y salir a nuestro encuentro....
e incluso la sorpresa nos la puede dar la mucho más escondediza hembra de currruca cabecinegra.
Un día corriente de mediados de octubre, si miramos a la mar, podremos ver el vuelo directo y rasante del cormorán moñudo, negro como el azabache...
Y si miramos al cielo veremos el vuelo elegante y pausado de la nívea garceta.
Un día corriente de mediados de octubre podremos localizar el rastro de una garduña que se haya puesto como el quico de moras...
o nos sorprenderá la presencia de una preciosa cardera, quizá llegada en migración desde el lejano norte, no podremos por más de maravillarnos ante la idea de las grandes distancias que recorren estas pequeñas y admirables criaturas.
Todas estas maravillas naturales pueden pasar delante de nuestros ojos un día corriente de mediados de octubre, y muchas otras. Y todas ellas se agradecen aún más si han transcurrido varios días sin tener ocasión de contemplarlas.
¿Cómo será el día no corriente?
ResponderEliminarSaludos.
Esos son los días extraordinarios César. Un saludo
EliminarDichosos los ojos que te ven y te leen en un "día corriente". Me ha encantado la entrada.
ResponderEliminarGracias Pilar, me alegra un montón.
EliminarBuf, como estaban hoy los barrios altos de Gijón de bisbitas, parece que hubo buena entrada.
ResponderEliminarAdemás parece que otras especies se han retrasado algo...
EliminarGracias
ResponderEliminarDe nada Clara...;-)
EliminarPues eso amigo....que un día corriente de mediados de octubre es un gran día para no aburrirse ¿verdad?...
ResponderEliminarSalud!!
En efecto Xurde, con las aves raras veces te aburres, siempre hay algo que mirar.
EliminarSalud¡¡¡