viernes, 21 de febrero de 2014

Siguen cayendo

A merced de las olas, un cadáver de arao común Uria aalge se encuentra en la orilla de la playa de Bañugues ayer jueves 20 de febrero. Probablemente ha venido a morir a la playa, uno más tan sólo de los muchos miles que están sufriendo la misma suerte este cruel invierno en las costas del Golfo de Vizcaya.


Su tono achocolatado delata que este ejemplar pertenece a la subs. albionis de las colonias británicas, que es la que inverna mayoritariamente en aguas del Cantábrico. Como todos los que van apareciendo estos días, está limpio. Su muerte no se debe en esta oportunidad a la contaminación, los continuos temporales le han impedido alimentarse como es debido.


Los araos comunes están sufriendo una dura prueba, esta primavera sus colonias estarán algo más vacías. Esperemos que tengan una buena temporada de cría y puedan recuperarse.


1 comentario:

  1. Nada se puede hacer, así de injusta es la vida pero no dejaremos de sentir tristeza cuando vemos imágenes como estas. Un abrazo, Pin.

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