sábado, 6 de abril de 2013

Una familia en apuros

Esta mañana me acerqué a la playa de Bañugues, y cuando me iba me llamó la atención un piído insistente que escuché y que venía de la zona del río, bajo el puente. Al acercarme adiviné la razón, una familia de patinos de ánade azulón Anas platyrhynchos, de pocos días de vida, nadaba por la zona, un total de 10.


Los pobres habían quedado separados de su madre por el escalón que hay bajo el puente, y aunque intentaban subir de nuevo adonde ella estaba no podían por la fuerte corriente del río.



En estos vídeos puede verse como lo intentan y mamá pata los llama con insistencia.



La azulona optó por bajar adonde estaban sus crías, y aunque les mostraba la forma de subir, era imposible, los patinos eran demasiado pequeños.



Sí eran capaces de subir al escalón de la derecha, transversal al puente, pero al intentar remontar la corriente los volvía a lanzar aguas abajo.


Así que llegados a este punto, decidí que no podía dejarlos allí. Mi primera idea fue intentar cogerlos uno a uno para subirlos río arriba, así que a arremangarse el pantalón, y al tajo. Fracaso total, por supuesto, los patinos no se dejaban coger y eran un montón. Lo único que saqué fue una mojadura.

Después de secarme en casa volví a la playa a ver si habían conseguido subir, pero seguían en la misma tesitura. Pero esta vez venía preparado, y además me encontré por allí con Anabel y Geoff para ayudarme. Un nuevo intento de cogerlos en el agua tuvo el mismo resultado, así que se imponía cambiar de estrategia.

Se nos ocurrió que podíamos colocar algo en el lateral del puente para ayudarlos a cruzar, así que cogimos una tabla de los restos de la obra del bar, colocándola así como véis.


Y esta vez sí¡¡¡ Mamá pata cruzó con sus patinos, no andando por la tabla, sino en el pequeño canal entre ésta y la pared, aprovechando que habíamos desviado la corriente. Lograron atravesarla 8 de las 10 crías, los otros dos se quedaron atrás. Pensando que era mejor salvar a sus 8 crías que arriesgarse a perderlas de nuevo, la azulona se fue río arriba.



Como digo, un par de crías se quedaron atrás, pero por desgracia poco más podíamos hacer por ellas...



Espero que puedan volver con su pequeña familia. Pero al menos logramos rescatar a la mayoría.

9 comentarios:

  1. Como me hubiese gustado echar una mano...Ojalá tengan todos un final feliz..... ¡ Y yo en mi casa cambiando la plantilla del blog!

    ResponderEliminar
  2. Menuda odisea, una pena los dos que quedaron y deseo que lo logren, si no lo hacen será la selección natural. Yo he visto un solo pollo con su madre en San Andrés. Saludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, fue toda una aventura, pero de esas que te dejan un buen sabor de boca. Estos tenían sólo unas horas de vida, no sé si llegaría a un día o dos...Un saludo

      Eliminar
  3. Pues me quedo sin palabras, hablo por la pata y te doy las gracias.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Y yo a ti portavoz de la familia jeje, la verdad es que estuvo muy bien. Un saludo

      Eliminar
  4. Has vuelto por alli? Por ver si la pata va con diez o con ocho. ..

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ya sé que te habría prestado echar una mano con el tema, la verdad es que hoy pasé por allí y no vi ni a la familia ni a los dos patinos que quedaron solos, quiero pensar que también habrán subido...Un saludo

      Eliminar
  5. Esperemos que hayan podido juntarse toda la familia...muy buena labor has echo amigo...gracias por demostrar que hay gente a la que no le importa mojarse por lo que nos gusta.
    Salud!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracies Xurde, al menos algún patín de esta familia hemos podido salvar. Ahora ya queda en manos de su madre jeje...estas cosas siempre son gratificantes. Un saludo

      Eliminar