Este invierno 2018/19 hay varias especies que están
destacando por su escasez. Una de ellas es el lúgano Spinus spinus, que está
siendo muy poco observado en general en Asturias. En mi caso por ejemplo tan sólo he
podido localizar un grupo de 7 ejemplares en una aliseda del concejo de Avilés
durante el mes de diciembre, y al que pertenecen las fotografías de esta
entrada. Este hecho contrasta además con el anterior invierno, en el que fue
bastante regular y frecuente.
Así pues, podemos preguntarnos ¿donde están los lúganos que
este invierno no han llegado hasta aquí? Pues bien, pongámonos a investigar un
poco. En primer lugar, se puede averiguar de dónde proceden las aves que llegan
hasta aquí a invernar. De acuerdo con los estudios de anillamiento el lugar de
origen de estos lúganos estaría en los países nórdicos, en especial Finlandia y
Noruega, llegando hasta aquí después de viajar por toda la fachada atlántica
europea.
La alimentación de los lúganos se basa principalmente en las
semillas, aunque varían su dieta según
la época del año. Durante la reproducción predominan las de coníferas, sobre
todo abetos y piceas, mientras que en otoño el principal suministro viene de
las semillas de abedul, y en invierno los lúganos consumen sobre todo semillas
de alisos.
De esta manera, los movimientos migratorios postnupciales vienen
condicionados por la producción de estas semillas, por ejemplo los años buenos
de semillas de picea ocasionan un alto éxito reproductor y las poblaciones de
lúganos migradores aumentarán. Del mismo modo, si hay una buena producción de
semillas de abedul en otoño los lúganos retardarán sus desplazamientos ya que
permanecen más tiempo cerca de las zonas de cría.
Estos balances en la producción de semillas explican en
buena parte las fluctuaciones en las poblaciones de lúganos invernantes en
Asturias. Se suele achacar los años de escasez a cuestiones climáticas, como la
ausencia de frío, pero las oscilaciones en sus números se deben más bien a
factores alimenticios.
Sin embargo esto no aclara del todo a la pregunta que nos
hacemos en esta entrada de donde esta nuestros lúganos. Por suerte hoy en día
tenemos una herramienta muy útil para intentar responder diferentes cuestiones
relacionados con la fauna, como son las plataformas de ciencia ciudadana, las
cuales demuestran una y otra vez su gran utilidad.
En lo referente a las aves la
más utilizada probablemente es ebird. Es posible obtener mapas con el uso de
esta plataforma con diversos objetivos, entre ellos por poner un caso las
densidades y zonas de distribución de especies comunes.
Así, podemos extraer los mapas para la distribución del
lúgano en los dos últimos periodos invernales de diciembre-febrero para el
conjunto del continente europeo, como se aprecia a continuación. Se observa que
en el invierno 17-18 la Península Ibérica presenta colores con un tono morado
más intenso, lo que indica mayor presencia y densidad de la especie, mientras
que en el invierno 18-19 estos tonos morados son más claros, lo que indica
menor densidad.
Si bajamos al detalle, a la zona europea más a nuestro
alrededor, obtenemos algún detalle más. Así, en el invierno anterior 17-18 la
zona cantábrica aparece con los tonos morados más intensos que antes comentaba,
mientras que en este último invierno aparecen más tenues. Por el contrario, en
algunas zonas de Centroeuropa la presencia de lúgano parece haber aumentado
bastante este invierno con respecto al anterior, lo cual se aprecia bastante
bien en la zona que he rodeado con un círculo.
Se sabe por los estudios de anillamiento que los lúganos de
origen finlandés pueden seguir estas dos rutas en sus desplazamientos tras la
época de cría. Incluso es muy posible que las mismas aves sigan diferentes
rutas en inviernos sucesivos, condicionadas por los factores alimenticios que
antes comentaba. Esto puede responder en parte a la pregunta que formulaba al
principio de la entrada, ¿Dónde están los lúganos?
Para saber más:
Eriksson, K. 1970. The autumn migration and wintering
ecology of the Siskin Carduelis spinus. Ornis Fennica 47: 52–68.
ASENSIO, B. 1985. Migración e invernada en España de los
lúganos (Carduelis spinus ) de origen Europeo. Ardeola 32: 179-186
Interesantísimo.
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